¿Que Hay de Nuevo, Viejo? - Hoy, Salmuera para el alma. Por Queen of Hearts.

 “Si los pesados mi amor, llevan todo ese montón de equipajes en la mano, oh mi amor yo quiero estar liviano. Cuando el mundo tira para abajo, yo no quiero estar atado a nada”. (Los Dinosaurios, Charly García).  

Julio de este particular año 2020, cuarentena que sigue siguiendo, contando los días desde que caímos bajo las garras de este bicho que se  ríe en la cara de todos nosotros y de muchas cosas que dábamos por garantizadas: trabajo, actividades, vacaciones, entorno social y  familiar, proyectos, o la vida misma.

Es muy difícil acomodarse a esta nueva realidad que impone parates y postergaciones de todo tipo, distancias y ausencias hasta nuevo aviso; hay que estar muy en eje para poder seguir el día a día y contemplar este panorama, que necesita atención y contención de todo tipo, cualquiera sea el cristal con el que se lo mire, y no rendirse en el intento.

Así que, inspirada en él maestro Atahualpa Yupanqui que desde su Chacarera de las Piedras decía: “…Te voy a dar un remedio. Que es muy bueno pa' las penas. Grasitas de iguana macho, Mezclaíta con yerba buena…”, trato a diario de buscar remedios para el alma, y hoy vengo con una receta menos intrépida que la de Don Ata, pero bastante efectiva.

Se trata de "Salmuera", una muy interesante agrupación que nació el año 2015 como dúo, para luego pasar a ser un trío, y consolidarse como un quinteto de música popular y ciudadana, tal como ellos se definen.  Y después de mucho tiempo de producción, grabación, mezcla y masterización, pudieron editar su disco debut homónimo, lanzado en mayo de este año a través de las principales plataformas digitales como Spotify, Shazam, Deezer, Itunes, Youtubemusic, entre otras.

La banda tiene en sus filas a los hermanos Francisco (guitarra, voz y composición) y Emilio Noce (percusión) Matilde Vitullo (bandoneón), Nicolás Cianis (piano, voz y composición) y Diego Suárez (flauta), todos de extenso currículum en cuanto a formación académica y de experiencia,  no solo como artistas profesionales sino como docentes, a los que podemos ver en este video que armaron en medio de la cuarentena con un tema que no está en el álbum, pero viene bien para ir entrando en clima:

 

 

El disco se compone de 8 temas propios, con letras y melodías que nos llevan de paseo por distintos parajes y estados de ánimo, gracias a las intensidades rítmicas y los estilos musicales que abordan, lo que explicaría tal vez porque Salmuera sea un nombre apropiado para identificarlos. 

Porque sabido es que la salmuera tan usada en la cocina, especialmente en la nuestra, sirve para darle más intensidad a los asados, por ejemplo, gracias a los condimentos que la componen y a la perseverancia con la que se le va pincelando una y otra vez esa mezcla al objeto del deseo gastronómico para que al final explote una fiesta de sabor para los sentidos.

Y esto es lo que logra la banda moviéndose en forma ágil dentro de diferentes sonidos populares de nuestras raíces musicales, no solo argentas sino como parte de la cultura latinoamericana: una identidad cargada de lugares que nos recuerdan a otros lugares, a los que siempre da gusto volver.

El disco arranca con Halito/De Canaleta, con el que ya empezamos a hacernos amigos de ese piano que va a estar presente en todo el trabajo y nos va a marcar el ritmo de cada pieza, con los vientos de guía y la base sólida que conforma el resto del equipo, para seguir con Coreando una Zamba, el primer instrumental que nos ofrecen.

Luego aparece Lamento Negro, que evoca a un candombe arrabalero de corazones rotos, sin perder el humor,  para seguir con Vuestralonga, otro de los temas -al que la letra no le hace tanta falta - porque la destreza de los instrumentos hacen lo suyo, reflejando el amor y respeto por la música tradicional de nuestro país, aunque no parece haber un límite con esta característica, que a veces me remonta a algunos momentos musicales de Les Luthieres. 

Porque con un poco de oído afilado podemos darnos cuenta que a esta muchachada la música le va por diversos caminos, con influencias diversas, porque hay aires de música contemporánea, tango, rock, jazz, sin que haya que hablar de fusión de estilos, sino más bien de una amalgama de ellos, como por ejemplo, con El Clasiquito, que dio la excusa para el segundo video grabado en plena cuarentena y aporta una cuota extra de diversión.

Llegando al final, sigue apareciendo el mensaje de cada instrumento en comunión con los otros, más la voz que le va aportando un color y tonalidad diferente ante cada aparición, como, por caso, en Endioses, un especie de tango moderno hipnótico, al que le sigue Tulonga, otro de los instrumentales destacados con el bandoneón a tope y Se Mueve, que cierra esta grata novedad discográfica que llega para quedarse.

 

Para más contenidos e información:

Disco completo en Spotify:

Https://open.spotify.com/album/1O8PO3OWSSCH9B5SYZPJ9U  

Web: https://salmuera.wixsite.com/salmuera  

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