Nuestras aves en leyendas: hoy Leyenda del biguá - Por Rompiendo el Cascarón

Entre los guaraníes, Biguá era un hombre esbelto y fuerte que vivía feliz con su esposa,  Yerutí, en una choza a orillas del río Miriñay.

La belleza de Yerutí había despertado el interés de Capiberá. Un día, aprovechando la ausencia del esposo, Capiberá raptó a la joven y se la llevó atada en una piragua. Al enterarse, Biguá lo persiguió y, cuando pudo alcanzarlo, lo mató. Pero a los pocos minutos se dio cuenta de que su amada había desaparecido en las aguas del río.

Biguá la buscó por las orillas y en la selva, pero solo el eco devolvía su lastimero llamado. Ya vencido, al fin se arrojó a las aguas del Miriñay, porque sospechó que ahí había muerto la hermosa Yerutí.

Pasado un tiempo, los integrantes de la tribu vieron un ave de plumaje negro que volaba sobre la choza en la que solían vivir los enamorados, después se internaba en la selva y, finalmente, se arrojaba a las aguas del río Miriñay. Consultaron al hechicero de la tribu. Él les dijo que a quien habían visto era Biguá transformado en ave, que seguía buscando a su dulce amada.


Biguá (Phalacrocorax olivaceus, Neotropic Cormorant)

• ʟᴏɴɢɪᴛᴜᴅ: 63cm

• ᴅᴇsᴄʀɪᴘᴄɪᴏ́ɴ: macho y hembra sin dimorfismo. Negruzco con brillo; iris celeste verdoso. Plumas blancas en la base del pico durante el período nupcial. Juvenil pardo, con ventral claro.

• ʜᴀ́ʙɪᴛᴀᴛ: ríos, lagunas, arroyos y bañados.

• ᴄᴏᴍᴘᴏʀᴛᴀᴍɪᴇɴᴛᴏ: se lo observa solo o en grandes bandadas que se desplazan al ras del agua desde los dormideros hacia los lugares de alimentación, donde caza arponeando peces y crustáceos. Para secarse se posa en postes, ramas o montículos con las alas extendidas. Nada sumergiéndose. Es buen buceador. Vocalización grave y áspera.

El biguá es un ave que vive generalmente en colonias mixtas junto a distintos tipos de garzas: garza blanca (Egretta alba), garcita blanca (Egretta thula), garcita bueyera (Bubulcus ibis), garza mora (Ardea cocoi), garza bruja (Nycticorax nycticorax), y otras especies como cuervillo de cañada (Plegadis chihi), cuervillo cara pelada (Phimosus infuscatus), carau (Aramus guarauna) y espátula rosada (Platalea ajaja). Al interactuar utilizando cada especie una parte de los sustratos compartidos, las colonias mixtas tienen beneficios en la alimentación y la reproducción. Asimismo, se fortalece la supervivencia de la especies ante las amenazas de depredadores.

Las colonias está ubicadas en lugares fijos a orillas de cursos de agua, donde quedan solo los individuos que incuban o cubren los pichones en época reproductiva. Generalmente la alimentación es a distancia, para lo que se trasladan durante el día.


Reflexión, por Edgar Allan Anzil

La organización vital del biguá, en convivencia pacífica con diversas especies, otorga incontables ventajas para el conjunto. También la especie humana ha logrado optimizar su trabajo y producción en general gracias al desarrollo de la organización cooperativa, en la cual pueden advertirse enormes ventajas para el grupo, sin desmedro del individuo.

Mientras el sistema capitalista apunta al egoísmo individual, al individuo pensado en sí mismo, el sistema cooperativista se basa en la solidaridad y tiene en mira el bienestar del grupo por sobre el del individuo. Esto no significa, en absoluto, un efecto negativo para este. Por el contrario, el individuo ve potenciados todos los aspectos de su capacidad productiva, al optimizarse el tiempo y los medios de que dispone.

Pensemos solamente en un emprendimiento cooperativo de trabajo: el grupo comparte los elementos de trabajo que al individuo le costaría adquirir; el grupo distribuye las tareas de forma tal que, mientras unos realizan labores propias de la actividad, otros velan por las restantes tareas que cada individuo requiere para su vida (en otras palabras, el individuo también puede descansar). De esta forma de organización, una vez más copiando a la naturaleza, los seres humanos podemos optimizar nuestra capacidad de trabajo sin agotamientos, y podemos arribar no sólo a un mejor rendimiento de nuestra producción, sino también a una sensible mejoría en el tiempo del cual disponemos para las restantes actividades no productivas, ocio incluido. En conclusión, podemos alcanzar una calidad de vida infinitamente superior.


Hoy vamos a terminar con dos temas musicales, en primer lugar "Garzas Viajeras" de Anibal Sampayo, en grabación especial para Fogón y Mate de Camila López y Pini Muñoz.



Y por último, "Canción de las garzas moras", de Linares Cardozo, en versión del ensamble musical La Creciente.



Rompiendo el Cascarón son Néstor Alejandro Maltempo y Raúl Gustavo Borgo

 


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